martes, mayo 23, 2006

Eusebius Szesh. Czestochowa, Polonia

Me llamo Eusebio. Soy polaco y soy camionero. Vivo en Calafell. Tango un piso nuevo con todas las ventanas al sur. Mi piso tiene un salón, dos lavabos, dos habitaciones, una cocina y una terraza y es muy caliente. Vivo en Calafell desde hace dos años.

Entre mi país y España hay cosas diferentes. Hace más calor que en mi país. La naturaleza es más bonita que en mi país. Hay palmeras bonitas, el mar, y las casas, las calles y las autopistas nuevas que están haciendo. Las fiestas que hacen en España, como por ejemplo Halloween, Carnaval y los tres Reyes Magos que dan caramelos a los niños. También me gustan los árboles de olivas, el color azul que tiene el mar, el color rojo que tiene la tierra, el color de las flores. También me gusta Barcelona con su puerto, Madrid, Valencia, la capital de la naranja y Sevilla y Galicia también son muy bonitas.

Me gusta de los españoles que les gusta hacer muchas fiestas. Casi siempre se ríen y que les gusta tener muchos amigos, y tienen muchos amigos. No me gusta de los españoles que se piensan que son más inteligentes que yo.

jueves, mayo 18, 2006

Elisabeth Kolan. Czestochowa, Polonia.

Soy Elisabeth Kolan. Mi fecha de nacimiento es el 10 de abril. Soy polaca de la ciudad de Czestochowa. Vivo en un piso de Calafell. Mi piso es muy bonito, tiene una cocina, dos habitaciones, dos lavabos y un salón. Ahora no trabajo.

De España lo que más me gusta es el mar, que hay muchas flores, palmeras y árboles de olivas y el clima.

Los españoles son gente muy alegre. Les gusta salir mucho, reunirse y divertirse. Van muy tarde a dormir. Por la noche cuando no hace tanto calor acostumbran a ir a los restaurantes, cervecerías, vinaterías para tomar una copa. Cenan muy tarde y después bailan en la discoteca. La gente se divierte aquí, también.

Mucha gente toca la guitarra y por eso se canta mucho también. A muchos les gusta pasear por el parque y por el paseo de la playa.

Todo el año hay muchas celebraciones, ya que no hay en España ciudad o pueblo, por pequeño que sea, que no tenga sus fiestas dedicadas al santo patrón. A mi me gusta mucho Barcelona con sus monumentos. Barcelona es una ciudad muy bonita. A mi me gusta mucho la pintura de Salvador Dalí.

Vivo en España porque mi marido trabaja aquí. Ya llevo en España dos años.

jueves, mayo 11, 2006

Mustafa Salmoun. Tánger, Marruecos.

Me gusta viajar, salir, la tranquilidad; todo lo bueno de esta vida menos molestar la libertad de los demás.

Mi casa es un piso de dos habitaciones, baño, cocina, una terraza pequeña y un comedor, bueno, para mí es suficiente.

En el tiempo libre hago mis cosas en casa: limpieza del piso, lavar la ropa y también salir con mis amigos a jugar a fútbol.
Estoy en España sólo para trabajar y ganarme la vida y cuando esté bien económicamente regresaré a mi país.

De España me gustan muchas cosas: el clima, las playas, los monumentos romanos, árabes… y también, de momento, que hay mucho trabajo para mi.

En el futuro quiero hacer un proyecto de mi especialidad (chapa) y tener gente trabajando para mi. También quiero una casa bonita y un buen coche y una buena mujer.

miércoles, mayo 10, 2006

Felicia Craciun. Timisoara, Rumanía.

Mi nombre es Felicia, tengo 20 años y vivo en España desde hace dos años. Me acuerdo de que estaba muy nerviosa al llegar a España y, al mismo tiempo, muy ansiosa por conocer otro país, una nueva cultura, costumbres diferentes y otro clima.

Al salir a la ciudad me sorprendieron muchos los horarios de las tiendas, de los supermercados, que son muy distintos a los de mi país. Aquí las tiendas abren a las 10h, en cambio allí a las 7,30h o a las 8h. También me impresionó ir a un supermercado o a la plaza y ver que la gente estaba esperando su turno tranquilamente sin intentar pasar antes, mientras que en Rumanía todo el mundo tiene muchísima prisa y quiere llegar primero, por eso se llega a discutir muchas veces.

Veo muy correcto la forma de organizar los medios de transporte. Aquí para subir al metros, autobús o al tren tienes que pagar al subir, en cambio en Rumanía compras el billete si quieres en un estanco (y digo «si quieres» porque no te pide el conductor el billete) el revisor es el que tiene esta obligación, pero como el revisor pasa pocas veces, la mayoría de la gente aprovecha para subir gratis, cosa que a mi me parece muy incorrecta.

Lo bueno es Rumanía es que los terrenos no son tan caros y la gente cuando se compra una casa puede disfrutar de un jardín y un patio bastante grande.

La comida también es bastante distinta, digo esto porque en mi país se come mucha más fruta y verdura, que aquí es «una tortura», en cambio no se come mucho pescado, la mayoría prefiere optar por la carne. No sé cual será más sano o más rico, creo que cada uno tiene sus gustos y los respeto.

En Rumanía los programas de la televisión se pagan mensualmente, en cambio aquí es gratis. Solo si quieres un programa en especial tienes que pagar. Pero también tengo que decir que no tienes más de 5 minutos de anuncios, mientras que aquí muchas veces dejas de ver la televisión por culpa de los anuncios que duran por lo menos 15 o 20 minutos.

Los colegios se organizan distinto que aquí. Hay dos turnos: uno por la mañana que empieza a las 8h y se termina a las 14h; y otro que empieza a las 12h y termina a las 18h. Pienso que es mejor así porque tienes tiempo libre por la mañana o la tarde para disfrutar.

He notado que en España se da muchísima importancia a los santos, a las ferias, la gente aprovecha cualquier festivo para salir de fiesta, bailar y disfrutar. En mi país no se les da tanta importancia a los santos y tampoco a las ferias, que, por cierto, no son tantas como aquí. Para la mayoría de los rumanos un día de fiesta es un día de descanso, un día de tranquilidad, un día en familia.

Lo que más me gusta de España es que la gente es muy alegre, viven la vida, se sienten siempre jóvenes. Para ellos la edad no importa, nunca les impide salir de fiesta, viajar, hacer deporte, ir al cine o hacer una fiesta en casa.

Creo que España es un país completo que puede satisfacer cualquier deseo y para cualquier bolsillo. También creo que aquí la vida es mucho más fácil, mucho más feliz.
Como puedes darte cuenta me gusta muchísimo España, pero si alguien me preguntara qué es lo que no te gusta le contestaría que a veces los españoles son muy ruidosos, pero creo que esto es lo único que no me gusta de España.

El destino me hizo encontrar en España la paz, la tranquilidad con mi media naranja, así que ahora es mi casa. Todavía tengo mucho que viajar, descubrir y disfrutar.


martes, mayo 09, 2006

Fonseca. Porto Velho, Brasil.

Vivo en España con cinco amigos y una niña de cinco años, y me gusta mucho este país. Vivo en Calafell en un piso muy bonito con piscina y terraza, en Residencial Park Diagonal.


Soy del norte de Brasil, del Amazonas, donde hay mucha naturaleza y mucha fiesta.

En España busco trabajar bien, vivir bien, comer bien y voy a vivir aquí para siempre. España me gusta porque hay mucho trabajo, muchas personas buenas y muchas chicas guapas.

lunes, mayo 08, 2006

Severine Imara. Isla Reunion.

¡Me encantan los viajes: vivir y visitar cosas nuevas, para mí es estupendo! Me interesan más los países con mucha historia como por ejemplo los países de Europa: Francia, Italia, Grecia... Pero nunca había pensado en ir a España. ¿Porqué? La explicación es muy fácil. No conocía ni el idioma, que es el castellano, ni la cultura, excepto las corridas de toros y el flamenco (por eso no me interesaba).

Pero la vida es así. Ahora vivo aquí descubriendo día tras día las facetas de España. La vida aquí es muy diferente de mi pequeña isla. Mi sorpresa fue grande cuando llegué. ¡Este país es sorprendente! Tiene grandes riquezas, culturas que me fascinan... pero a veces las cosas que me sorprenden no son esas. También tiene cosas que para mí son extrañas.

Mi punto de vista de España aún es un poco superficial. No la conozco suficiente para establecer una visión más general y objetiva. Pero entender que la vida para mí es muy diferente y que desde que estoy aquí, vivo cambios radicales. ¡Por eso pienso que puedo decir mi opinión!

Hace meses vivía aún en mi isla, “La Isla de la Réunion”, una pequeña isla en el Océano Índico. Allí, las cosas no son inmensas, su historia es reciente y la vida es muy tranquila. ¡Además, tienen solo dos estaciones: el verano caluroso y el verano fresco! ¡Qué maravilla!

Al contrario de Réunion, España es muy grande, es inmensa ¡No se puede comparar! Aquí, las estaciones se suceden y las transformaciones se ven. Por otro lado, cada zona se diferencia por su proprio clima. Menos mal que vivo en la Costa Dorada donde el clima es ideal y caluroso.

Lo que más me gusta de España son los edificios medievales: los castillos, los pueblecitos con las calles pavimentadas... Es un país muy cultural: Barcelona por ejemplo. Cada vez que voy a esta ciudad me siento como una niña descubriendo un nuevo juego. Las calles cuadradas, la Sagrada Familia, la Plaza España, el barrio gótico... son maravillosos para mí.

Por otra parte, la gente que vive aquí es, en general, muy simpática. La mayoría me parece abierta. Les gusta hablar y te hacen sentir bien. ¡Me encanta eso! Y, sobre todo, a los españoles gusta la fiesta y saben hacerla. Eso me parece muy bien porque mucha gente hoy ha olvidado lo que es disfrutar de verdad ¡España vive! Eso se entiende: los españoles son todos trabajadores. Trabajan mucho tiempo, duro y por poco dinero en comparación a Francia. ¡Tienen mérito!

Sin embargo, este país nos revela, cada vez más, sus diferencias y puntos débiles. Lo primero que me llama la atención, son los horarios de comer. Son siempre en retraso con relación a otros países. No digo que sea malo pero cuesta mucho para mi como extranjera. Tuve muchas dificultades para adaptarme al principio.

Además, me parece que casi todos comen mucho. La mesa, cada comida, esta siempre llena de variadas comidas. La mesa de cada día aquí parece la mesa en un día especial en mi casa: no lo entiendo, siempre están buscando pretexto para tomar algo. Menos mal que la comida está rica.

Por otro lado, los españoles me parecen demasiado familiares, y faltos de discreción. Para mí, sus amplitudes de miras no les permiten en ningún caso tutear a casi todo el mundo, y creer que somos amigos de todo el mundo. Lo que pasa es que en Francia, la vida en sociedad es diferente. La gente, por cortesía se pone barreras. Eso es normal. Hacemos la diferencia entre la vida social y la vida privada. No hablamos de la misma manera con alguien que conocemos la primera vez y alguien que conocemos desde hace tiempo. La familiaridad se utiliza solo con gente que se conocen y son íntimos. Ahora estoy un poco acostumbrada, pero al principio estaba chocada y vejada. Por falta de discreción, quiero decir que la mayoría habla de sus cosas a “todo el mundo”: es decir que cuando están hablando, lo hacen muy fuerte. Son un poco “folloneros”. Entender que igual que Francia, mi isla tiene una manera de vivir muy diferente de aquí. Somos reservados y cuando veo eso, me quedo un poco pasmada.

En lo que concierne a las cosas del país, no entiendo esta voluntad de diferenciarse por comunidades. Eso está bien por una gestión administrativa, pero entre la gente no puede ser. La mayoría no dice que soy español sino que soy catalán, valenciano, gallego... Es cierto que las comunidades existen pero no es obligatorio que la gente se vea como enemigo. Eso es peligroso para el país. Además, para los extranjeros, España es un conjunto de comunidades y no solo una. La mayor parte del tiempo, no damos ninguna importancia a esta guerra de posición, sino que España es España. Para mí, deberían pasar más tiempo mejorando la situación social del país, como por ejemplo mejorar las leyes sociales sobre el trabajo, la vivienda...Veo su situación peor que Francia. Me parece un poco precaria. No tengo envidia de los que son de esta tierra.

Por otro lado, lo que me subleva es que nadie reivindica cambios y mejorías. Son todos inertes. Parecen contentos de su vida y vivir en un sueño, mientras que la realidad es totalmente diferente. Sé que Francia no está perfecta pero por lo menos intenta de hacer algo.

Por todo ello, pienso que España es un país de dos vertientes como todos los países. A algunos les gusta y a otros no. Es verdad que yo prefiero tener las mejores condiciones de vida francesas, y vivir en España con sus muchas cualidades. ¿No se puede cambiar? Sabéis, si estoy aquí es que un español ha podido convencerme para venir a este país. Aún, no estoy desilusionada. La verdad es que aunque España tiene sus problemas y retrasos en relación con Francia, me gusta vivir aquí. Y hasta ahora no pienso irme de España.
¡VIVA ESPAÑA!

domingo, mayo 07, 2006

Zuzana Osteniova. República Checa.


Me llamo Zuzana Osteniova y soy de la República Checa. Soy Pintora desde hace mucho tiempo y pinto al oleo sobre tela.

En España estoy porque el paisaje, las montañas, los ríos, los bosques son los más bonitos de Europa y me inspiran mucho a pintar y viajar. Lo que más me gusta de España es parte de Cataluña, que es más variada y más interesante. Primero de todo me gusta Barcelona -ciudad de Antoni Gaudí- muy moderno y muy atractivo; en segundo lugar la Costa Brava, por ejemplo, Tamariu, LLafranc, Empuria Brava, Tossa de Mar... Además, por otro lado, están los Pirineos catalanes, las montañas de La Molina, el paisaje entre La Seu y Puigcerdà, Sort o Viehla. No puedo parar de pensar en más y más pueblos y ciudades que me gustan mucho.

Me quiero quedar aqui en España unos tres o quatro años más, para desarrollar mis capacidades con la pintura y para ampliar los conocimentos sobre este país, su cultura, arquitectura y el idioma. Seguramente que todo esto lo puedo aprovechar en mi país, donde estará mi corazón para siempre.

jueves, mayo 04, 2006

Youssef Alfartaj. Tánger, Marruecos.


Mi nombre es Youssef y mi apellido Alfartaj. Tengo 29 años y vivo en la calle Monturiol de Calafell, provincia de Tarragona. Mi país es Marruecos y mi ciudad Tánger que está enfrente de Algeciras. Mis oficios son albañil, mecánico, o decorador de casas. Me gusta la acrobacia, el fútbol y nadar.
Estoy aquí porque me gusta trabajar, viajar y conocer gente. Entre España y mi país hay muchas diferencias, por ejemplo que aquí ganamos más porque hay más derechos, menos pobreza y muchos turistas. Aquí hay de todo.

No me gusta el racismo y la represión, ni tampoco las cosas malas. Me gusta estudiar en clase porque hay una profesora muy buena porque sabe cómo tratar a los extranjeros. De los españoles me gustan muchas cosas, pero no puedo decirlas todas aquí. Al final quiero decir que somos todos iguales.
¡Suerte a todos!







Antonio Farias Filho. Presidente Médici, Brasil.


Soy brasileño, nacido el 10 de mayo de 1962, en el estado de Halagaos, nordeste del país, en la cercanía del gran y buen río São Francisco. Con menos de cinco años de edad cambié con mis padres al estado de Mato Grosso do Sul, donde viví hasta los 22 años, cuando cambié sin mi familia al estado del Paraná en el sur del país por motivos de trabajo y estudios. Entonces, de este me fui al estado de Rodônia al norte de Brasil, donde viví hasta hoy en la ciudad de Presidente Médici, cerca de la capital, Porto Velho, a 12 horas de autocar del país vecino, Bolivia. Presidente Médici tiene 28 000 habitantes, pueblo humilde, trabajador, religioso, hospitalario, pero amante de la fiesta y los bailes.

Ningún pueblo, ciudad, provincia o incluso país es 100% completo ni perfecto en relación a otro. La verdad, siempre hay cosas mejores o peores en unos y otros.

A mi me encanta mi país porque hay playas muy bonitas, buenísimas y limpias al nordeste y en el sur, solo en pensar en el clima tropical, verano todo el año… Me gusta la hospitalidad y receptividad del pueblo brasileño.

Además, está la preciosa diversidad de la naturaleza del norte, hablando también de la diversidad medicinal en las hierbas; en el sur su peculiar invierno; en el centro-oeste encontramos la rica diversidad agrícola y agropecuaria; mientras que en el sudeste hay mucho desarrollo industrial y en todo el país, en general, desarrollo tecnológico y médico.

Y todo esto está muy bien, creo, pero también hay pobreza, racismo, tráfico de armas y drogas, prostitución, unos que tienen mucho y otros nada o casi nada, es decir, muy poco. En otras palabras, una renta por cápita mal distribuida. Es cierto que esto me parece injusto, es horrible y avergüenza a un ciudadano de bien, pero creo que es posible cambiar este cuadro vergonzoso y de mala fama, divulgada a través de la tele en todo el mundo, porque el poder del pueblo brasileño está en su voto en las elecciones. Somos nosotros los que elegimos a los políticos buenos y malos que están allí. Los malos muchas veces buscan sus propios intereses y hacen que Brasil, que en verdad está desarrollado, continúe siendo para el mundo un país subdesarrollado y del Tercer Mundo, incluso siendo tan rico, maravilloso y grande.

Lo que he dicho hace pensar y reflexionar en el tema “España es diferente”: muchas veces son las cosas malas que tiene un pueblo o país que hace que algunos se marchen. Aunque no todos, porque es cierto que hay españoles en otros países por motivos de trabajo y de estudio, y hasta por cambio de familia. Se sabe que cuando se conoce otro país, provincia o incluso ciudad lo que pasa es que siempre se encuentran cosas diferentes, personas con sus costumbres, culturas, tradiciones propias. Yo tuve problemas con los horarios para hacer las cosas.

Lo que no me gusta de Cataluña es, por ejemplo, el transporte público como los autocares y trenes. Lo veo como muy malo, precario; aunque tengamos carreteras y autopistas que son buenísimas, con buenas señalizaciones, hay un alto índice de accidentes, seguramente porque hay mucho abuso de la velocidad y despecho de las normas de tráfico. Tampoco me gusta la calidad del agua potable, que es en general pesada, con un alto índice de sal.

He observado que la construcción civil es muy diferente, los materiales aplicados e incluso el desperdicio de los materiales. De aquí, Cataluña, me encanta el compromiso con la limpieza de las calles y su pavimentación.

Hasta el momento, si me posibilitaran la oportunidad de los gobernantes de los países en general creo que deberían hacer un intercambio informativo de cosas buenas y bonitas que hay en sus países para demostrar e incentivar el turismo que es una fuente de desarrollo.

Para acabar quiero decir que me gustaría conocer mejor toda España y también toda Europa porque a mi me gusta mucho viajar y conocer cosas nuevas y lugares diferentes como sitios históricos y museos.

Mohamed Ahidar. Tetuán, Marruecos.


Soy Mohamed Ahidar. Trabajo. Soy del norte de Marruecos, de Tetuán. Me gusta trabajar, hablar con mis amigos y me gusta la vida. Vivo en el pueblo de Calafell desde hace un año y medio, en una casa buena en el primer piso es grande y tiene una buena forma.
Me gusta jugar a fútbol, pasear con mis amigos y también entender idiomas e internet. Estoy aquí en España para trabajar y vivir la vida mejor.

Aquí en España hay muchas cosas diferentes a mi país, por ejemplo, el idioma, muchas fiestas, trabajo y hay mucho tráfico. Aquí en España hay cosas que no he visto nunca en mi país, por ejemplo que los hombres se casan con los hombres.

Me gustan los españoles en el fútbol porque quieren mucho al fútbol y yo también. Me gusta mucho el Barça. Los españoles hablan mucho y muy rápido. También les gusta la moda y la playa. Todo me gusta de los españoles.

Al final, espero volver a mi país para terminar mi vida allí con mi familia y con un trabajo bueno.


Carlos Antonio Araujo Lima. Porto Velho, Brasil.

Vivo en España, en Calafell, en un piso que está en la Rambla Nova. Micasa es muy bonita, con terraza. Soy brasileño de la ciudad de Porto Velho. En España quiero trabajo para ganar mucho dinero. Tengo muchos oficios: peluquero o soldador, pero es muy difícil encontrar trabajo porque no hablo español.
Me gusta vivir aquí porque el dinero español en mi país vale mucho. Me gusta jugar a fútbol. Estoy en España para buscar trabajo y aprender la cultura de España.

España me gusta: hay mujeres guapas, la playa, trenes modernos y calles con mucha luz por la noche. Es diferente de mi país el horario de comer, la lengua y no hay gente en la calle. Los españoles comen en el bar, son agresivos y no hablan con los vecinos. Tampoco invitan a los desconocidos. No me gusta de España el clima porque hace frío, la comida porque todo es pasta ni el ruido del tren.
En el futuro quiero vivir con mi familia en España.